Dilma Rousseff es desde hoy la primera mujer que ocupa la presidencia del gigante sudamericano. Sucesora de Lula Da Silva, con 62 años y un amplio historial de luchas a lo largo de su vida pretende seguir la línea del anterior presidente.
En su primer discurso después de las elecciones, ha declarado que luchará para eliminar la miseria que afecta aún al país brasileño. También se ha referido a que el nuevo gobierno seguirá apostando y trabajando, en línea con su predecesor, para que Brasil vaya alcanzando el lugar que le corresponde acorde con los tiempos; esto es, un país que se encuentre en el estatus de desarrollado.
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| Dilma Rousseff, hoy, después de votar en las elecciones |
En cuanto a los resultados electorales, se ha obtenido un éxito mucho más discreto que los que consiguió Lula Da Silva tanto en los comicios de 2002 como en los de 2006. Rousseff como candidata del Partido de los Trabajadores (PT) ha conseguido un 56,05 % de los votos, mientras que su contrincante, José Serra, como candidato al Partido de la Social Democracia (PSDB) ha sido apoyado por un 43,95 % del electorado brasileño.
La ocupante número 40 del sillón presidencial brasileño ha trabajado bajo el gobierno de Lula Da Silva en los últimos años. Sabe lo que es llevar un ministerio así como ser jefa de gabinete del Gobierno brasileño. Aun así, hace tan solo diez meses la población brasileña daba mayormente su apoyo al que hoy es el derrotado, José Serra.
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